Viernes 23 de Marzo 2012
UN VOLVER A LA CLÁSICA Y TRADICIONAL COMEDIA MUSICAL
Publicado en “Teatro Con Estilo”
Escrito por Mariano Casas Di Nardo

Para que algo funcione, nada tiene que estar librado al azar. Y esta parece haber sido la premisa fundacional con la que se levantó el telón de Mamma Mia! –uno de los musicales más esperados y exitosos del momento– en la porteña Avenida Corrientes. Coyuntura que hizo que los focos de los escépticos periodistas, apunten hacia su elenco, vestuario, musicalización, dirección y sobre todo, puesta en escena; para hacer su típica masacre literaria en el diario del día después. Pero no, uno a uno, todos estos ítems son tildados con un diez a medida que progresa la obra, como otrora lo hacían nuestras maestras de primaria con los chicos estudiosos. Un acierto absoluto desde el minuto uno, hasta el cierre a puro baile, con un momento de híper sensibilidad, como cuando Marisol Otero desafía a su enamorado con “The Winner Takes It All”. En ese instante, nos damos cuenta que Broadway se mudó a nuestra ciudad por una temporada. Un momento soberbio, donde la protagonista, que ya a los pocos segundos nos hace olvidar de la Meryl Streep del homónimo film, explica y demuestra por qué es una de las mejores voces de la comedia musical de nuestro país.
Mamma Mia!, el musical basado en las canciones de ABBA, es un volver a la clásica y tradicional comedia musical, que utiliza la canción tanto para emocionar, alegrar y entristecer. Igual a la original que se presenta desde hace años en el país del norte y similar a la película que Meryl Streep protagonizó junto a Pierce Brosnan. Todas comparaciones estériles que se esfuman cuando las eternas canciones de ABBA se materializan en las voces de esta horda de efervescentes artistas.El tándem que componen Marisol Otero (Donna Sheridan), Gabriela Bevacqua (su amiga Tanya) y Silvana Tomé (su otra amiga Rosie) da la fuerza ideal para que todo el resto se luzca. Gentileza que agradecen y a su vez potencian Paula Reca (Sophie Sheridan) y Luciano Bassi (Sky), para darle juventud y romance a la puesta. Completan los tres supuestos padres: German Barceló (Sam Carmichael), Mariano Muso (Bill Austin) y Diego Bros (Harry Bright), siendo este último, quien más sobresale en su papel, con pinceladas corporales que descomprimen al libro, como diciendo “esto que ven es genial y festivo, pero también puedo irme de lo serio, hacerme el loco y lucir”. Sin dudas, su inclusión es otro gran acierto.
Algo es cierto, las canciones de ABBA ya tienen consigo una fidelidad que embellece cualquier obra; la cuestión es agregarle la actuación y la puesta en escena para que brille, se neutralice o reste. Pero es el reconocido Robert McQueen quien eleva todo para que estemos hablando de otro nivel de musical. Un crédito más abajo, surge la figura de la directora residente Rocío Rodriguez Conway para alinear a todo el elenco. Claro, hay cosas inevitables de controlar y que hacen a la pulsión interna de cada actor, que hace de cada intervención de Marisol Otero, un viaje por todos los significados del diccionario del sentimiento. Su tono bajo nos abruma de nostalgia, para convertir todo rápidamente en alegría cuando ilumina su registro. Otros puntos altos de la obra son las pastillas de humor under de Silvana Tomé, para dejar en claro, que en una mansión de lujo, un clown de un barrio periférico, también puede hacer reír. Su coterránea Made In Perez Costa, Gabriela Bevacqua, pone su sensual y fuerte pisada, para cincelar un trinomio de lujo.
Un vestuario preciso, una musicalización lógica y una iluminación acertada y grandilocuente, hacen que el rompecabezas teatral se arme en los primeros segundos, para permitirnos disfrutar de más de dos horas de un musical asombroso, de la forma más distendida; de esos que quedan para siempre en la memoria de los que la vieron y en el debe de los que no la vieron. Si nuestro bolsillo nos los permite, para ver más de una vez.
Por Mariano Casas Di Nardo
mcasasdinardo@speedy.com.ar

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Lunes 19 de Marzo

IDEAL PARA JÓVENES Y FANÁTICOS DE ABBA

Publicado por Ámbito Financiero

Escrito por Patricia Espinosa

En “Mamma Mía!” brillan Marisol Otero y Paula Reca

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Lunes 19 de Marzo 2012
UN MUSICAL BIEN PEGADIZO QUE INVITA A CANTAR Y BAILAR SIN INHIBICIONES
Publicado por Tiempo Argentino
Escrito por Mercedes Méndez

Mamma Mia! reúne las canciones de ABBA que suenan en todo casamiento y las entrelaza con una trama sencilla donde prevalece la alegría. El espectáculo, que ya fue visto por 50 millones de personas en el mundo, no defrauda.

No intenta ser solemne. Tampoco es pretencioso. No se vale de lo majestuoso ni de grandes efectos especiales. Los creadores del musical Mamma Mia! sabían que contaban con algunas de las canciones más pegadizas del mundo del pop y se valieron del humor y de coreografías rápidas y coordinadas para armar un espectáculo sin fisuras. Ideal para el público que quiere salir de la función cantando las canciones de ABBA y con los discos en la mano, para seguir con la diversión en la casa.
Tal vez uno de los secretos de este musical que se convirtió en un fenómeno mundial, que se mantiene en Londres durante 13 años en escena y que ya fue visto por más de 50 millones de personas, sea no pretender ser lo que no es. Mamma Mia! no es un drama complejo, no baja línea sobre ningún aspecto de la vida; es una obra simple, un enredo de romances con buenas intenciones que se apoya en un potente trabajo de dirección y que maneja con habilidad el pasaje de los diálogos a las canciones sin que el espectador tenga la sensación de haber cambiado de canal.
La obra presenta la historia de Sophie (Paula Reca), una joven de 20 años que está por casarse y descubre en el diario privado de su mamá Donna (Marisol Otero) que hay tres hombres con los que ella estuvo y que alguno de ellos podría ser su padre. Para descubrir su identidad, Sophie invita a los tres candidatos a su casamiento: el shock que genera en Donna reencontrar a los hombres de su pasado y el desenlace de este conflicto es, en resumen, todo el argumento de la obra.
¿Y por qué este musical es tan exitoso? Sus creadores en los Estados Unidos encontraron una fórmula que llevan con precisión a cada país donde estrenan la obra. Una dirección ajustada, una banda poderosa y artistas preparados para actuar y cantar, sin que estas dos tareas sean el agua y el aceite. La obra combina la coordinación de las coreografías, a los actores muy atentos a la dirección musical e interpretaciones comprometidas. Cada momento donde termina el diálogo y empieza la canción está absolutamente justificado por el hilo conductor de la obra, tanto desde el argumento como desde las interpretaciones. Y a esto, se le suma el fuerte trabajo con el humor, que viene de la mano de hits históricos. Es casi imposible que el público no entre en la euforia Mamma Mia!: comedia, hits, bailes parejos y nostalgia por una época que ya no está.
Marisol Otero se luce en el papel principal. Sabe manejar tanto el registro del humor como el dramático y la potencia de su voz acompaña los mayores desafíos vocales de la obra. Pero las revelaciones de este musical son las amigas de Donna, Tanya (Gabriela Bevacqua) y Rosie (Silvana Tome). Ellas son las responsables de los mejores momentos de humor del espectáculo: imperdible cuando le cantan a su amiga angustiada “Chiquitita” y empiezan con una serie de imitaciones, que resaltan el tono lúdico de la pieza.
La habilidad de la dirección se nota en cómo se combinan las canciones con el eje dramático. En el momento en que los tres hombres invitados tienen la revelación de que podrían ser los padres de Shopie, en la isla griega donde transcurre la historia hay una fiesta. Claro, suena y bailan “Voulez-Vous”: cuando cada padre por separado habla con su hija, la música baja en volumen pero no pierde intensidad, el ensamble se mantiene atento, haciendo sentir la canción; termina el diálogo y estalla el estribillo. Todo en perfecta coordinación.
Para el final, no queda otra que bailar: la gente que se contuvo durante toda la obra, empieza a cantar y agitar las manos al ritmo de los máximos hits de ABBA. El sello de un musical.

Excelente!

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Domingo 18 de Marzo 2012
UN DIVERTIDO HOMENAJE A LOS 80s CON LA MÚSICA DE ABBA
Publicado por La Nación
Escrito por Federico Irazábal

Nuestra opinión: Muy Buena!

Tal vez uno de los mayores aciertos del trabajo de Catherine Johnson, responsable del libro del musical Mamma Mía! sea precisamente el no haberle dado a este musical una gran historia. La anécdota es tan pequeña como inverosímil y esto no es un comentario negativo. Más bien todo lo contrario. Johnson parece entender con esto que el único modo de llevar a la escena la música y la estética de ABBA es precisamente reproduciendo la atmósfera y la filosofía que el grupo sueco produjo. Y si hay algo que ellos representan es ingenuidad. Ingenua es su estética, su música y su letra; e ingenuo es este musical que cuenta una historia tan pequeña como inverosímil, estrenado originalmente en Londres, en 1999, dirigido por Phyllida Lloyd, quien en 2008 hizo la versión cinematográfica protagonizada por Meryl Streep.
 

Sophie está a horas de casarse con Sky. Y decide, en un secreto absoluto, saldar una vieja deuda que su madre tiene con ella: averiguar quién es su padre. Por azar, Sophie encuentra un viejo diario de Donna en el que figuran tres nombres de hombres que casi en simultáneo estuvieron con su madre. Imposibilitada de determinar cuál podrá ser el progenitor, invita a los tres con el sueño de reconocerlo apenas lo vea. Ese es el punto de partida de este musical que va a poner en escena a otros personajes que irán avanzando en sus historias en paralelo al casamiento y que, como sucede en los buenos melodramas, producirá recién en el final el cierre de todas las historias que abrió en su inicio.
Desde el punto de vista estructural, la propuesta tiene una complejidad extra: servirse de canciones compuestas por el grupo sueco que no cuentan una única historia y que en este espectáculo deberán organizarse para narrar la historia de Sophie. Así, letras que tenían un determinado sentido interpretadas por el grupo musical aquí cambian su sentido original para ir acompañando la historia de Sophie, su madre y sus amigas. Pero esta complejidad tiene una ventaja: la platea conocerá las canciones y podrá reconocerse (su propia historia, su memoria vivencial con Abba) sin importar demasiado la coherencia que esas letras tengan con la escena.
Una pequeñísima isla griega, con su típica arquitectura y sin demasiado vínculo con la tecnología mundana, será el marco en el que se desplieguen tanto las canciones más melódicas como las más representativas de la música disco, el pop y el glam rock que tan bien representó ABBA en su momento, y que aquí será desplegado con la remembranza del grupo que en su juventud Donna y sus amigas tenían y que será la excusa ideal para el ingreso en el escenario de esas telas brillantes, cargadas de volados y suecos enormes que tanto remiten al vestuario original de Abba.
En términos musicales, hay que decir que Gardelín como director de orquesta residente entiende y juega a la perfección con esa estética, aunque es de esperar que con el correr de las funciones puedan mejorar la relación entre la orquesta y los intérpretes, ya que por momentos se pierden las voces del ensamble. Y, tal vez, uno de los lenguajes más sobresalientes de este espectáculo musical sea precisamente el coreográfico, ya que puede parodiar y homenajear -con idéntica intensidad y calidad- el estilo coreográfico de los setenta y ochenta, el que por momentos se ve un tanto limitado por una escenografía que envuelve y encierra el espacio dificultando una mayor expansión de los cuerpos.
Entre los intérpretes hay que destacar a los roles femeninos, que son a su vez los que más desarrollo tienen. Entre ellas quien se destaca por su calidad vocal e interpretativa es Paula Reca, a cargo de Sophie, uno de los roles protagónicos y movilizadora absoluta de la acción. Marisol Otero, por su parte, se luce al frente de su versión de Donna, pudiendo jugar con las escenas emotivas con la misma calidad que en aquellas más cercanas a lo kitsch. Gabriela Bevacqua y Silvana Tomé, como las amigas de Donna, tienen la dificultad de componer los dos personajes más caricaturizados y lo hacen con resultados verdaderamente magistrales..

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Sábado 17 de Marzo 2012
MAMMA MIA! TODO GRACIAS AL AMOR Y GRACIAS A LA MÚSICA
Publicado por 26Noticias.com.ar
Escrito por Claudia Seta

Como no podía ser de otra manera se luce la reina danzante, dama de los musicales.
Junto a ella, una ascendente chiquitita y dos amigas de fierro que deslumbran con sus simpáticas ocurrencias.
Las melodías de ABBA logran emocionar una vez más y llevan a vivir un hermoso cuento de amor.

Los jóvenes de fines de los '70 y principios de los '80 vivían a pleno en un mundo libre donde se daban permiso a hacer uso de lo prohibido y la música acompañaba esa diversión. Pero los años pasan, las cosas cambian y las responsabilidades llaman. Esa adrenalina es la que se vive en Mamma Mia!. El musical exitoso creado por Catherine Johnson tiene la aprobación de dos ex ABBA, deslumbró al mundo y ahora legó a la Argentina.

Cada canción está adecuada a las escenas que reflejan los sueños, las emociones, las pasiones y los desamores del pasado y del futuro. Y como no podía faltar, el vestuario no faltan los brillos de la etapa dorada de la banda sueca.

La historia la protagoniza Donna (Marisol Otero), dueña de una taberna griega que sigue adelante a pesar de no tener tanto “Money, Money, Money”. Prepara la boda de su hija Sophie (Paula Reca) y es una buena excusa para reencontrarse con sus amigas de la juventud, Rosie (Silvana Tome) y Tanya (Gabriela Bevacqua) a quienes no ve desde hace mucho tiempo, cuando dejó de lado su adolescencia al quedar embarazada. “Honey Honey” es la elegida para la ocasión.

Claro que lo que nunca esperaba era volver a ver a los tres presuntos padres de la joven, a punto de dar el “sí” ante su enamorado Sky (Luciano Bassi), y es ahí cuando todo se complica. Es Sophie, que tuvo un sueño (I have a dream), quien quiere entrar del brazo de su progenitor y al encontrar el diario íntimo de su madre, aparecen tres nombres: Sam (Germán Barceló), Harry (Diego Bros) y Bill (Mariano Muso). Se le ocurre invitarlos a su casamiento sin que Donna lo que sepa. La mentira no durará mucho, porque inevitablemente, ella estará en frente de los tres y su doloroso pasado saldrá a la luz. “Mamma Mia!”, entona la Otero, la dama de los musicales argentinos que ya deslumbró en las dos versiones de “La Bella y la Bestia” -como Bella y como la Tetera Sra. Potts-, “Grease”, “Jesús de Nazareth”, “Peter Pan” y “El mago de Oz”, entre otras.

En aquel entonces, la protagonista se había enamorado de Sam, pero también había tenido encuentros íntimos con Harry y Bill. La cigüeña llamó a su hogar, y su madre le cerró las puertas. Donna crió a su hija como madre soltera y su amado volvió a su vida habitual, se casó, y nunca volvió a Grecia.

Veinte años después, el reencuentro. De la mano de sus simpáticas y ocurrentes amigas, Donna recuerda sus días de juventud. Justamente, Rosie y Tanya harán que ella vuelva a ser la que era antes: alegre, feliz. En medio, excelentes voces entonarán a la perfección cada melodía pegadiza de ABBA.

En “Chiquitita” y “Dancing queen”, Bevacqua y Tome se lucen en su escena de animar a la protagonista y sacarle esa tristeza de su interior. En “Lay all your love on me” (Sos todo para mí), Bassi y Reca dejan todo en sus voces. Para la despedida de soltera, Donna y sus amigas divertirán con “Super trouper”.

Y el público mueve sus pies y aplaude al ritmo de “Gimme Gimme Gimme”, “The name of the game” o “Voulez Vous”.

Una impecable escenografía se disfruta en el sueño de Sophie con “Under attack” donde trata de averiguar, de una vez por todas, quién es su padre. Hay más emociones mezcladas en “Uno de nosotros”, “S.O.S”, y un exquisito “Qué dirá tu madre” (Does your mother know) donde Tanya brilla en su confesión de haberse acostado con Pepper, un joven veinte años menor que queda en la piel del simpático Julián Rubino.

Un encuentro entre padre e hija conmueve en “Es por mí, es por vos” (Knowing me Knowing you), la añoranza por los años hippies se vive en “Un verano” (Our last summer), la despedida de una madre a su hija se disfruta en “Se me escapa el tiempo” (Slipping through my fingers) y hasta hay tiempo para el gran enfrentamiento entre Donna y Sam en el siempre emocionante “The Winner takes it all” (Va todo al ganador).

Rosie cumple uno de los mayores atractivos en la obra y tiene su escena hot con Bill al sonido de “Apostá por mí” (Take a chance on me), lo seducirá justo antes de la llegada del sacerdote que celebrará la boda... que por esas cosas de la vida tendrá otros protagonistas cuando se oiga el “Decí, decí que si” (I do, i do, i do, i do, i do).

Los seguidores del gran cuarteto sueco disfrutarán de “Honey Honey”, “Thank you for the music” y los más bailados: “Dancing queen”, “Mamma Mia” y “Waterloo” en un final feliz, como suelen terminar las bellas historias de amor contadas en los cuentos.

Este equipo, acierta con bellas interpretaciones que nada tienen que envidiarle a Broadway o Londres. Y el aporte de las melodías de ABBA hacen lo suyo en este impecable musical realizado en tierras argentinas donde en dos horas se muestran diversos conflictos humanos que son resueltos gracias al amor, y gracias a la música.

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Sábado 17 de Marzo 2012
MAMMA MIA! – CHIQUITITA DIME POR QUÉ…
Publicado por Clarin
Escrito por Pablo O.Scholz
pscholz@clarin.com

Crítica “Mamma mia!”. La comedia musical que se estrenó ayer es una excusa para revivir canciones de ABBA.

Mamma Mía! La base y el corazón de Mamma mia! son las veintidós canciones que, en pleno auge de la música disco, el cuarteto sueco ABBA popularizó e hizo bailar a millones. Se buscó una excusa para volcarlas al escenario en el West End londinense y se creó la historia -bien de telenovela- de Sophie. A los 20 años va a casarse en una isla griega, y como no sabe quién es su padre porque su madre Donna siempre le negó saberlo, invita a los tres candidatos que, leyendo su diario íntimo, figuran como sus posibles progenitores.
El grueso de los argentinos -a menos de que sean algunos de los 50 millones de espectadores que el musical tuvo en escenarios alrededor del planeta- conoce la trama gracias a la película con Meryl Streep (Donna), Amanda Seyfried (Sophie) y Pierce Brosnan (Sam, uno de los tres candidatos a padre). Pero vayan avisados de que la película es posterior a la obra, por lo que algunas (varias) cosas han cambiado, y si esta puesta local sigue a rajatablas la que se ve en Broadway desde hace una década, no pueden echarle la culpa si por algo se sienten decepcionados.
Porque así son las cosas: el mar y las casitas griegas, en la calle Corrientes, tienen un correlato más bien pobretón. Ante tanto musical con despliegues escenográficos impactantes, el de Mamma mia! es llamativamente modesto, de una humildad franciscana. Dos paneles móviles blancos para mostrar el interior o exterior del hotel -y apelar a la imaginación del es pectador, claro-, y unas ramas verdes que suben y bajan. No es un reclamo, simplemente un lamento.
A los fanáticos de ABBA esto no debe importarles. Y allí radica el nudo del asunto.
Mamma mia! es como una fiesta en la que uno puede sentirse a gusto, o ser convidado de piedra. La obra es tan plana en su puesta en escena -no se aprovecha la profundidad, no hay ribetes o adornos ya no escenográficos- que da la impresión de que verla en un televisor sería prácticamente lo mismo. Sólo que allí no estaría el furor de los fans, que hacen palmas en algunos temas, y acompañan en los estribillos en otros.
Todo -como dice el manual de la buena comedia musical: si es drama es otra cosa- es luminoso. Las coreografías son sencillas y sólo algunas letras de las canciones han variado (no hablamos de la traducción) para “acomodarse” a la historia; otras siguen intactas e indemnes.
El elenco está mejor en los roles femeninos, con Marisol Otero a la cabeza, que en los masculinos, más macchietados. Las vueltas del musical en la Argentina han hecho que dos excelentes actores de Avenida Q -Silvana Tomé (Chow Fan) y Manuel Victoria (Gary Coleman)- hoy estén en roles desparejos, como coprotagonista (Rosie, amiga de Donna) y en el ensamble. Una cuestión de casting que a los fanáticos, a quienes va dirigida la obra, poco interesará.

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Viernes 16 de Marzo 2012

ESTRENO DE MAMMA MIA! – VISION SIETE ENTREVISTA A GERMAN BARCELÓ (SAM)

Columna de Espectáculos de Gabriela Rádice.

El exitoso y esperado musical que batió records a nivel mundial llega a Buenos Aires. Mamma Mia! se estrena este viernes en el Teatro Opera Citi. Marisol Otero, Gabriela Bevacqua y Silvana Tomé son las protagonistas de esta obra que se nutre de las canciones del grupo sueco ABBA.

En ésta oportunidad Gabriela Rádice entrevista al actor Germán Barceló quien interpreta a Sam Carmichael en el musical Mamma Mia!.

Emitido por Visión Siete, noticiero de la TV Pública argentina, el viernes 16 de marzo de 2012.

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Viernes 16 de Marzo 2012

MAMMA MIA! – PUBLICIDAD DE TV

Aquí compartimos la Publicidad de TV de Mamma Mia!, grabada por Enrique Manfredi, después de estar “horas” delante del televisor para poder captar éstas  imágenes! Gracias Henry!

Viernes 16 de Marzo 2012
MAMMA MIA! UN ÉXITO ARROLLADOR, AHORA EN BUENOS AIRES
Publicado por RedTeatral.com
Escrito por Cristian Witte

Nostalgia, diversión y energía ...MUCHA ENERGIA en la versión argentina del famoso musical

¿Cómo opinar objetivamente de un musical que conjuga dos de mis grandes pasiones?...Casi imposible.
. Me considero un admirador de ABBA y amante del teatro musical...por lo que, MAMMA MIA! es la conjunción de esas dos debilidades.
. Una obra que me llega desde muchos lados, que tiene muchos elementos para convencerme, pero también que me convierte en un juez bastante observador y exigente a la hora de evaluar.
. Por distintas razones, he sido lo suficientemente afortunado para haber visto varias versiones de éste musical en distintos países y en distintos idiomas, por lo que creo que a ésta altura ya puedo reemplazar a cualquiera...desde un protagonista, hasta al "árbol 18".
. El estreno de la versión argentina, ha sido mas o menos como cuando se tiene un hijo (bah!, me imagino que debe ser asi, porque no tengo ninguno)...Una gran noticia es la confirmación de que va a venir, luego está el período de gestación donde se va acumulando la ansiedad, y luego llega el día en que la "criatura" ve la luz...Bueno, ese día fue la función de prensa que la productora T4F hizo para todos los medios periodísticos, y que generosamente incluyó a RED TEATRAL.
. A esta altura creo que esta "crítica" va a ser un poquito mas larga de lo normal porque se me vienen a la cabeza, cientos de observaciones hechas.
. Al inicio un pequeña desilusión, pues en todo el mundo a la obertura precede el consabido aviso de apagar celulares, no sacar fotos, y todo eso, pero también MAMMA MIA!, incluía una advertencia sobre la abundancia de música disco y zapatos de plataforma...una forma bastante simpática de entrar en clima...pero en ésta versión ya no está.
. Los primeros acordes de la obertura ya presagian la fuerza increíble que tiene la orquesta en la obra...Es que no olvidemos que la gran vedette y estrella de MAMMA MIA! no es ni el libro, ni las actuaciones, ni el baile... sino la música!...Esa música que supo hacer famosa el grupo ABBA allá desde principios de los años 70's y hasta mediados de los 80's. Gerardo Gardelín lleva la batuta excelentemente, y logra arrancar a la orquesta EN VIVO, los acordes que inevitablemente nos transportan a los años en que se escuchaban esas canciones a toda hora, y uno las tarareaba por la calle....
. El argumento en sí, es bastante bobo...Una madre soltera, con una única hija, que al estar a punto de casarse, decide averiguar quién es su papá, pero encuentra que hay tres posibles candidatos, y decide invitar a los tres al casamiento, pero sin avisarle a la madre...Bueno,...los encuentros y desencuentros, las distintas reacciones, y como llega todo al clímax de la boda, son sazonados por las canciones de ABBA....

. En este punto, hay que destacar SI o SI, el trabajo del traductor MARCELO KOTLIAR, que logró una adaptación increíble...Recordemos que el grupo ABBA, además del idioma sueco (su lengua materna), y del inglés, solo incursionó en el castellano....Fueron Budy y Mary McCluskey quienes realizaron las adaptaciones al español que utilizó el grupo....aunque no de todo su repertorio, sino sólo de 15 de las mejores canciones...(ABBA lanzó oficial y comercialmente más de 80 canciones)...
El musical MAMMA MIA! tiene 22 canciones, que incluyen 8 de las que se conocieron y fueron grabadas en castellano por los suecos....El gran problema que había con las letras que cantó ABBA en castellano, es que no se apegaban lo suficiente a la letra original, como para que se adecuen al argumento de la obra de teatro...(los McCluskey no se esforzaron tanto) ..asi que el trabajo tiene doble mérito para Kotliar, porque la comparación era inevitable... y salió vencedor...Las versiones de las canciones del musical, son POR LEJOS mejores que las originales del matrimonio McCluskey...(En este punto corremos con desventaja con todo el mundo angloparlante, pues ellos sí van al teatro y se encuentran con las canciones de ABBA tal como las conocieron...nosotros no...pero la música es genial, y eso compensa todo).
. El elenco argentino es sensiblemente mas jóven que cualquier producción que hubo hasta ahora...Marisol Otero (Donna, la madre de Sophie) no parece una cuarentona rondando los cincuenta, como fueron las Donnas de otras puestas, o incluso Meryl Streep en la película....pero, lo que al principio no terminaba de convencer a los fans de ABBA y MAMMA MIA, terminó por quedar en el olvido al ver a Marisol Otero con su mameluco azul, entonando las primeras canciones....ADEMAS, Marisol da vida a una Donna mucho mas terrena, sufrida y rústica que las que pude ver hasta ahora...Lo que hace que haya mas gente que pueda llegar a verse identificada...Su lucha es la de muchas!!...EN cuanto al canto, aqui NO PUEDO dejar pasar un dato. Cuando Björn Ulvaeus y Benny Anderson escribían sus canciones, tenian en cuenta que contaban con Agnetha Fältskog para partituras agudas, y Anni-Frid Lyngstad para las canciones bajas...Bueno...Marisol se maneja de forma impecable tanto en canciones originalmente escritas para una como para la otra...
. El resto del elenco está muy bien, obviamente con algunos mejores que otros...Gabriela Bevacqua creo que es la mejor TANYA que he visto hasta ahora...y Silvana Tomé construye una ROSIE en la que deja aflorar todo su ímpetu de comediante (pasó de ser la china-japonesa de Avenida Q, a la Tanya de Mamma Mia! en un tris).
. Paula Reca es la SOPHIE de la obra, y aunque actoralmente debe todavía pulir un poco su personaje, vocalmente está impecable...Ella abre la obra en el primer acto, y es ella también quien la cierra...Su voz es clarísima y dulce como lo debe ser el de una niña-joven llegando a los 20 años....
. Germán Barceló (SAM CARMICHAEL) ya tiene carrera artística, asi que su soltura y seguridad en escena estan asegurados...Es él el encargado de ponerse en los hombros dos de las canciones mas dificiles: ¿NO LO VES? ("S.O.S") y ES POR MI, ES POR VOS ("Knowing me, knowing you").
. Luciano Bassi también tiene ya trayectoria como cantante (supo dar vida al "Simba" de THE LION KING IN CONCERT en el 2010)...Aunque se nota que Bassi es cantante y no actor, su SKY convence y satisface. Lo poco que le falta actoralmente, desaparecerá seguramente en unas pocas funciones.
. El cuerpo de baile está impecable. Las coreografías originales de Anthony Van Laast, tienen como coreógrafo residente a Héctor Hernández, y no tiene absolutamente NADA que envidiarle a ninguna puesta del resto del mundo. ¡¡Hasta los saltos rusos de Edie y Pepper estan ahi!!...(Adrián Scaramella y Julian Rubino).
. Aqui quiero resaltar, que en ésta puesta, las coreografías (bailes) son exactamente las mismas que en todas las puestas del mundo, pues independientemente de la ciudad, tanto las coreos, como el diseño de la iluminación, el vestuario, la escenografía, los arreglos musicales, y los efectos de sonidos son los mismos....Es un musical cuyos derechos se compran "en paquete"....Las distintas producciones se comprometen a respetar todos los detalles con que fue concebida originalmente la obra...solo se permite (y recomienda) la traducción y adaptación del libro y letras...Lo único que difiere aquí un poco con las otras puestas internacionales, es la parte técnica...La del teatro Opera carece del elevador hidráulico que le da fuerza al numero final (tanto el camino que debería elevarse, como la plataforma de la que emergen las Dynamos)..pero NINGUNO de los dos detalles alcanza para quitar mérito....
. En definitiva, MAMMA MIA! es otro gran musical internacional que hace su paso por Buenos Aires. Confirma que es una de las ciudades culturalmente más ricas, y que es un bastión interesante para los productores de musicales de todo el mundo (en Sudamérica sólo San Pablo - Brasil, ostenta una cantidad similar de obras de teatro musical)...La productora T4F y Citi, ya adelantaron que sus próximos grandes musicales a estrenar en Buenos Aires, serán de la factoría Disney...."El rey León", "La sirenita", y "Mary Poppins"....La única pregunta que me cabe, es cómo voy a hacer en los años venideros...Disney es mi otra pasión y debilidad....Creo que voy a enriquecer a T4F y/o fundirme...
CRISTIAN WITTE cristian@redteatral.net
PD: no se pierdan los tres números musicales del cierre...Son el broche de oro, y la gota que faltaba para salir cantando del teatro...(más o menos como tomarse un Speed con Cafiaspirina)

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Viernes 16 de Marzo 2012
MAMMA MIA! – TIEMPO DE REVANCHA
Publicado por La Razón
Escrito por Santiago Puddington

Marisol Otero dice que con “Mamma Mia” tuvo su desquite, ya que el musical que le cerró las puertas en España, ahora le da una nueva chance en la adaptación nacional. “Son las cosas que te da la vida”, asegura.

Explota el Teatro Opera Citi, la gente de pie, aplaude y algunos comienzan a saltar. En el escenario Marisol Otero, Gabriela Bevacqua y Silvana Tomé, caracterizadas como ABBA, interpretan la versión en castellano de “Souper Trouper”- uno de los grandes hits del grupo sueco- en una suerte de mini recital. La obra ya terminó, pero el show continúa. De a poco aparece el resto del elenco para darle un cierre de oro a “Mamma Mia”, esta mega producción que brilló en la famosa Broadway y que hoy, a las 20.30, estrena su impecable adaptación nacional. “Es una fiesta la paso muy bien arriba del escenario, la música es hermosa y la respuesta de la gente es inmediata: se van todos felices, cantando las canciones”, cuenta una efervescente Marisol Otero, que interpreta a Donna, una madre soltera que debió luchar y trabajar mucho para criar a Sophie, su hija, y que siente un profundo rechazo por los hombres.
¿Cómo preparaste a Donna?
_En lo musical entrené mucho la voz con Ignacio Mascardi y después traté de no ver lo que hicieron en las versiones de otros países o en la película, sino de hacer mi Donna. Intenté buscarlo desde lo que le pasa a una mujer normal, que hace 20 años está sola sin un hombre al lado. Es un personaje lleno de emociones y de crisis, que me demanda mucho esfuerzo desde lo físico.
Con tanta potencia que se ve en escena, ¿cómo terminás al finalizar la función? _Quedo súper arriba. Es tal la alegría con la que termino, que me cuesta bajar. Cuando llego a casa tengo que tomarme un té y paso varias horas hasta que me duermo. Pero al otro día estoy con todas las pilas: creo que cuando uno está feliz con lo que hace disfruta todo.
¿Cómo es tu relación con el personaje?
_Me tocó hacer personajes maravillosos como Bella en “La Bella y la Bestia”, o Sandy en “Grease”; le canté al Papa en México y grabé mi propio disco, pero siento que ésta obra es algo soñado. Donna es un personaje con el que puedo mostrar todo como artista: el canto, la risa, el llanto, el baile, es una oportunidad que no tuve antes. Siento que puedo dar todo de mí y puedo mostrar todos los puntos míos como artista, me siento plena.
¿Qué significa “Mamma Mia” en tu carrera?
_Es una gran revancha, hace unos años yo había sido elegida para hacer el papel de Sophie en la versión de España. Cuando llegué allá todavía no habían elegido a quien haría de Donna y cuando lo hicieron, seleccionaron a una chica que no tenía nada que ver conmigo: era de piel morena, con rulos y súper flaca. Yo no daba como su hija, por lo que me tuve que volver. Cuando me entero que venía esta obra al país dije: ‘Yo no doy para Donna’, así que ni me presenté al casting. Pero un viernes me llamó uno de los productores, me comentó que me querían ver, y casi sin nada preparado -porque estudié dos horas antes el papel- fui a ver qué pasaba. Canté una canción como pude y quedé. Son esas revanchas que te da la vida.
Se dice que te seleccionaron por encima de Valeria Lynch y Patricia Sosa...
_La verdad no sé quiénes se presentaron, las admiro mucho a las dos porque trabajé con ambas y no me gusta sentir que le gané a nadie. Son situaciones en las cuales te eligen por diferentes aspectos, no te tenés que sentir mejor que nadie, ni que le ganaste a nadie.
Si bien su carrera se centra en la actuación y la comedia musical, Marisol lleva por dentro una cantante -grabó el disco “Un mundo mejor”, en 2005- que aquí resurge en el original mini-recital del final: “Me siento como si estuviera en River, es el sueño de todo artista: que la gente cante y baile con vos, es un momento único. Es ese rato que todos soñamos con tener, es una fiesta”, enfatiza.
¿Te interesa volver a la música?
_Sí, estoy armando un nuevo disco, es algo más personal que el anterior, son mis propias canciones. Pero recién está armándose, todavía no hay fechas.
Paula Reca, quien en la obra interpreta a la hija de Donna, comentó que por momentos se siente como la hija real de Otero por la relación que mantienen. Por supuesto Marisol reconoce que ese sentimiento es recíproco: “Tengo una personalidad muy maternal tanto con las alumnas de mi escuela de comedia musical como con los compañeros que tengo en los elencos en los que trabajo. Me gusta formar una relacion afectiva con mis compañeros y con Paula se da algo especial, ya que me genera tanta ternura que me salen cosas de mamá, le digo que se abrigue o que tenga cuidado, no lo puedo evitar (se ríe)”.
¿Ser mamá es un sueño por cumplir?
_Sí, pero por ahora no. Es una etapa que va a llegar un poco más adelante, por lo menos después de “Mamma Mia”.

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Viernes 16 de marzo de 2012
MAMMA MIA! EL MUSICAL QUE HACE CANTAR AL MUNDO
Publicado por La Nación
Escrito por Paula Gingins

Marisol Otero, Gabriela Bevacqua y Silvana Tomé son las protagonistas de esta obra que se nutre de las canciones del grupo sueco ABBA.

Charlan, se ríen, están felices. Como tres amigas de años, las actrices entran y salen de la historia que contarán-bailarán-cantarán con la pasión evidente que las mueve a sostener a estas criaturas, famosas en los teatros de todo el globo. ¿Es por ABBA? Tal vez gracias a esas melodías simples y pegadizas es que resulte fascinante para Marisol Otero ( La Bella y la Bestia, El violinista en el tejado ) meterse en la piel de Donna, o para Gabriela Bevacqua (Sádica!, Juicio a lo natural) encarnar a su amiga Tanya, o para Silvana Tomé (la china de Avenida Q) completar el trío como Rosie. Lo cierto es que hoy encabezan el elenco de Mamma Mia!, el radiante musical de Catherine Johnson que será, para muchos, el gran suceso del año de la cartelera porteña. "Cuando nos encontramos en los Premios Hugo empezamos a los gritos y abrazos, felices de compartir esto. Las tres nos sorprendimos de quedar seleccionadas", abren grandes los ojos y las sonrisas.
En un encuentro con La Nacion, cuentan que todo el equipo, que suma a Paula Reca (Sophie, la hija de Donna), Germán Barceló (Sam), Diego Bros (Harry), Mariano Muso (Bill), Luciano Bassi (Sky), Celeste Sanazi (Ali), Anabella Simonetti (Lisa), Adrián Scaramella (Eddie) y Julián Rubino (Pepper), entre muchos otros, se integró cómodamente. Todos ellos son los encargados de ponerles dramaturgia a letras tan pegadizas y familiares como "Chiquitita", "Dancing Queen", "Voulez Vous", "Dame, dame, dame", "Hay sólo un ganador", "Yo lo soñé", "Mamma mia!", "Take a Chance on me" y "Super Trouper".
En esas canciones, escondidas e hilvanadas en una anécdota simple con personajes riquísimos, radica el éxito de esta obra en todo el mundo. Basta mirar videos de sus versiones y descubrir cómo los espectadores sienten ganas de bailar en sus butacas en muchos tramos.
Las chicas están fascinadas con el norteamericano Robert McQueen, el director asociado: "Es un genio, humilde, generoso, talentoso. queremos que se quede siempre (risas)". Destacan también que es un profesional "apasionado por lo que hace" y generó en el elenco lo mismo que Janet Rothermel, la coreógrafa, y que Wendy Cavett, la supervisora musical: "Se armó un equipo hermoso y una no dice esto en todas las notas, porque no sucede en todas las obras", coinciden las actrices. "Es un éxito de los directores el casting que hicieron. Nos dan toda la libertad para trabajar: aportan los lineamientos y nos dejan hacer y crear. Es maravillosa su manera de comunicar lo que quieren; va más allá del idioma". Además, forman parte del proceso con los locales Gerardo Gardelín (director musical), Rocío Rodríguez Conway (directora residente) y Héctor Hernández (coreógrafo residente). Todo esto también depende de ellos.

UN GRAN DESAFIO
Las actrices detallan que para esta pieza, producida aquí por Time For Fun, tuvieron que escuchar al cuarteto sueco específicamente "para no tener variaciones en las melodías", ya que las notas debían ser exactas, y agregan que, para ello, Marcelo Kotliar también hizo un "laburo genial" en la traducción y adaptación. "Cada coma, cada respiración, se tiene que respetar -se ponen serias-. Son muy exigentes con eso." Desde el intenso trabajo vocal, la pieza les exige una concentración especial (Otero, por ejemplo, tiene un sostén en su coach Ignacio Mascardi). Tomé destaca que "es una obra muy difícil a nivel resistencia. El ensamble está fabuloso, bailan y saltan al mismo tiempo. ¡Y nosotras también! Estás saltando en una cama y tenés que sostener una nota -adelanta-. En ningún momento te parás a cantar: se trata de acciones que están completamente justificadas en la historia y es una obra muy aeróbica". Bevacqua suma que "vocalmente también es un gran desafío y ahora que conocemos más de ABBA, nos damos cuenta de que las canciones tenían un registro tan amplio. Y nos piden exactitud y son muy meticulosos".
El éxito de la película que protagonizó Meryl Streep podría hacer temer a cualquier intérprete. Pero parece que no es así. "No hay puntos de comparación con la película. En la obra cada personaje está tomado desde su realidad dramática, no tiene la liviandad de ser sólo un musical". Otero explica que Donna está enojada porque le pasan muchas cosas. "Hicimos trabajo de mesa con McQueen y desmenuzamos la historia de cada personaje. Ella tenía padres muy estrictos, católicos, y su único escape era ir a cantar con sus amigas Tanya y Rosie, hasta que queda embarazada de muy joven, la echan de su casa y se queda viviendo en una isla griega que conoció en una de sus giras. Su gran amor se casa con otra y por diversos sucesos no se sabe quién es el padre de su hija. De golpe -narra la actriz-, cuando su hija, 20 años más tarde, se va a casar e invita a sus tres posibles padres, porque lo leyó en el diario de Donna, ella se encuentra sin aviso con esos tres hombres de su pasado, pero es una mujer fuerte, que irradia alegría y energía y se hizo cargo de muchas cosas.
Estas mujeres tienen una amistad que supera sus diferencias de personalidad y se aceptan y se quieren. Cuando se reúnen, vuelven a tener 18 años, y cuando las amigas perciben mal a Donna, la invitan a jugar y divertirse. "El público se sentirá identificado con alguno de los personajes, eso seguro. Son unas señoras de 40 tan nenas. El espíritu de la obra es reflejar el lado inocente, infantil, genuino de esta amistad", reflexionan.
"Es un placer hacer algo con semejante estructura: empezar la carrera, pasar por el off y hoy estar acá. Todo te arma como actriz, todo te entrena. Las sutilezas, la exigencia, el control y el descontrol. es un laburo enorme pero acá hay una red de sostén absoluta -reconoce Bevacqua-. Es una obra que entusiasma y brinda energía positiva. Sorprende la cantidad de gente que está trabajando para que esto salga bien."

UN SUCESO EN BROADWAY Y HOLLYWOODLa intensa y divertida Mamma mia!, de Catherine Johnson, quien fue tentada por la productora Judy Craymer para escribir el guión, se estrenó en Londres, en 1999, antes que la reconocida película y, dos años más tarde, lo haría en el Winter Garden de Broadway. Marisol Otero cuenta que Meryl Streep fue a ver la obra "justo cuando sucedió el atentado de las Torres Gemelas. Quedó flasheada con lo lindo que le generó la obra y más tarde [en 2008] la convocaron para hacer la película".
La actriz, quien interpretará a la Donna local, reconoce que tenía "cierta inseguridad al encarar el papel en este musical, porque... ¡Imaginate semejante referencia!", se ríe. Lo cierto es que la ganadora del Oscar no estuvo sola en ese rol: la acompañaron entonces artistas como Colin Firth, Stellan Skarsgård, Julie Walter y Pierce Brosnan, entre otros.
Una curiosidad: si bien no es la primera vez que ocurre un intercambio similar en disciplinas artísticas de este tipo, la pieza estuvo dirigida, en aquel momento, por Phyllida Llyod, quien también dirigió el film más tarde.

CIFRAS
50
millones de personas vieron la pieza en todo el mundo
2000
millones de dólares de recaudación obtuvo sólo en taquilla
300
son las grandes ciudades del mundo en las que se estrenó
14
son las lenguas a las que fue traducida
13
son los años consecutivos que lleva en el West End de Londres (desde el 6 de abril de 1999)

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Viernes 16 de Marzo 2012
MAMMA MIA! – CÓMO RESISTIRSE?
Publicado por GeoTeatral.com
Escrito por Martin Dichiera

Luego del gran éxito mundial - desde su estreno en Londres en 1999 - llega a nuestro país el musical Mamma Mia (popularmente conocido por su versión cinematográfica). El espectáculo cuenta con las inoxidables canciones del grupo sueco ABBA. Aquí se presenta bajo la dirección de Robert McQueen - como director asociado - quien sigue la puesta original de Phyllida Lloyd.
La obra se centra en Shopie, una joven de 20 años, que está próxima a casarse, pero antes de hacerlo, quiere saber quién es su padre para que éste la acompañe al altar. Para cumplir su cometido invita a tres hombres que fueron parte del pasado de su madre (Donna) esperando, al verlos, poder rápidamente develar cuál de ellos es su padre… pero como en toda buena comedia de enredos, nada será tan fácil como parecía, ni nada sucederá como se esperaba.

Sin lugar a dudas, uno de los elementos más atractivos del espectáculo es que se cuenta la historia a través de las canciones de ABBA, con temas inolvidables como Super Trouper, Honey, Honey, Chiquita, Dancing Queen, Gimme! Gimme! Gimme!, The name of the game, Mamma Mia, Money, Money, Money, Voulez-Vous, entre otros.
El libro de Catherine Johnson es simple, y si bien no construye personajes con gran contenido, inteligentemente reemplaza dicha falta, con divertidas escenas y situaciones, y destacados números musicales.
Algo que puede inquietar a algunos de los fanáticos del grupo sueco es el tema de las canciones, como todo musical, las obras están cantadas en español, pero resulta importante señalar que las mismas cuentan con la traducción de Marcelo Kotliar quien respetó el sentido de las letras y la impronta de los temas originales.

Gerardo Gardelin lograr darle una potencia inimaginada a éstos grandes temas, con una orquesta que se apodera de toda la sala, y sacude a todos los espectadores
La presente versión está encabezada por Marisol Otero como Donna, la cual lleva adelante con gran nivel y presencia el papel protagónico, demostrando a lo largo de la pieza porqué tiene ganado ser una de las referentes del género musical en nuestro país. Paula Reca compone una dulce e inocente Shopie y se destaca ampliamente en su trabajo vocal (siendo uno de los papeles con mayor exigencia).

Silvana Tome y Gabriela Bevacqua tienen a su cargo los papeles de Rossie y Tanya,

respectivamente, los cuales son los dos de mayor lucimiento y posibilidad de juego en toda la obra, el trabajo de ambas es realmente delicioso y se logran complementar a la perfección, ésta es la primer oportunidad que tienen estas grandes - y jóvenes - actrices de presentarse en un espectáculo de esta magnitud, y sin duda, lo aprovechan demostrando todo su talento.

Entre los personajes secundarios, vale nombrar los trabajos de Anabella Simonetti y Celeste Sanazi, como las mejores amigas de Sophie, y de Julián Rubino como Pepper. Los papeles masculinos se mantienen en el plano de lo correcto. Finalmente se destaca el Ensamble tanto en lo vocal, como en el nivel coreográfico de los grandes números musicales.
Mamma Mia! es un espectáculo que tiene un claro objetivo: entretener, y lo logra a la perfección. Desde el primer minuto resulta imposible resistirse al encanto de ésta obra cargada de energía y alegria.... Sin dudas una verdadera fiesta para disfrutar al ritmo de las canciones de ABBA.

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Jueves 15 de Marzo 2012
ROBERT McQUEEN, DIRECTOR ASOCIADO DE MAMMA MIA! DIO UNA MASTER CLASS

Por Oscar Alejo Smirnov
 Director, dramaturgo y profesor, Robert McQueen ha sido el director asociado de las producciones de Broadway y de la Gira Nacional por Estados Unidos de Mamma Mia! Ha estado a su cargo la dirección también de las producciones de Mamma Mia! de México y Brasil.
Director asociado también de la puesta Argentina de Mamma Mia!, McQueen ofreció una Master Class, abordando el trabajo actoral en el texto, la canción como texto cantado y la coreografía.  Esta clase fue dictada en la “Escuela de Comedia Musical Marisol Otero”, quien es la protagonista de Mamma Mia! Argentina, en el papel de “Donna”.
Todos los presentes agradecieron a Robert McQueen su “talento, generosidad, humildad y Mestría!”…como lo expresó la misma Marisol Otero, “todo un Capo!”.

Más sobre Robert McQueen en Argentina: Clic AQUI

Jueves 15 de Marzo 2012
...del Viernes 02 de Abril (dìa de Pasada para la Prensa)
LA REINA DANZANTE
Marisol Otero, la dama de los musicales, nos revela los misterios de "Mamma Mia"
Publicado por 26Noticas
Entrevista y reporte de Claudia Seta
La actriz protagoniza uno de las obras más importantes del mundo que arribó a la Argentina.
La chica del Oeste responde por qué es imposible perderse el musical.
Una nota exclusiva con 26Noticias.
Marisol Otero, la dama de los musicales, contó en exclusiva a 26Noticias como vive la mágica experiencia de protagonizar “Mamma Mia”, la opera que llega a la Argentina con todos los éxitos de ABBA. De Ramos Mejía a Calle Corrientes. Una nota imperdible con la "chica del Oeste".
-¿Cómo tomaste esta experiencia de protagonizar este musical éxito en Londres hace más de diez años? 
Para mí, realmente, es un momento soñado el que estoy viviendo porque no imaginé que iba a disfrutar tanto del personaje, el equipo de producción, la dirección, el elenco, es todo soñado. La obra es maravillosa, es un cuento redondo que tiene todos los condimentos: amor, amistad. Cada persona que viene se identifica con un personaje. La dirección de Robert Macqueen que es un genio, hizo todas las puestas en todo el mundo y está acá con nosotros y es un placer. Estoy viviendo un momento soñado. 
-Y encima este personaje, Donna, que lo hizo Meryl Steep en el cine 
Yo la admiro muchísimo a Meryl Streep, me parece una artista increíble. La obra, por suerte, es completamente distinta en cada país que se hace porque tiene que ver con los actores y los directores que se toman. Una Donna distinta a la de Meryl, a la de Broadway, yo lo voy a contar como sería mi Donna, y eso es genial. Tener esa libertad como artista, poder crear es hermoso. 
-Con el condimento especial que es la música de ABBA, tan pegadiza... 
La música de ABBA es lo más. Yo me descubrí fanática ahora porque dije ésta canción la conozco y ésta también. Y te empezás a emocionar con todo y me da una alegría grande poder cantar estas canciones porque recuerdo mi infancia. Todo el mundo sabe de ABBA. Todo el mundo escuchó alguna vez a ABBA. Te acordás de un momento y hasta sentis el olor de lo que estabas comiendo en ese momento. Eso me pasa con ABBA, tanta nostalgia. 
-¿Cuál es la que más te sentís identificada o te emociona? 
Hay dos que son tremendas. Una es “Va todo al ganador”, que me costó bastante trabajar esa canción. Es muy interpretada, muy pasional, muy intensa, y gritada porque estoy enojada. Es una canción bellísima. Y después, “Super trouper”, “Dancing queen”, son canciones que uno las festeja. Hay una que le canto a mi hija, “Se me escapa el tiempo”, que habla de que la vida, los momentos son cortos y uno quiere retener esos momentos bellos y es imposible. La canta cuando se está casando la hija y se le va, mirá hasta se me pone la piel de gallina... es tan emocionante que hasta te cuesta cantarla. Estás al borde de la lágrima y llorando y tenés que manejar como seguir sin que la voz se te vaya completamente. Es un gran desafío y hermoso. 
-La “chica del Oeste” que le recomienda a la gente, ¿por qué no se tienen que perder Mamma Mia? 
Porque es una fiesta, la gente se emocionó, lloró. Estaban parados en la butaca gritando “otra, otra”. No se querían ir. Era algo tan bello ver eso, poder sentir que uno puede regalar a través del arte esa emoción y a través de esta obra hermosa esa alegría. Es la misión del artista. 
“Mamma Mia!” sube a escena oficialmente en Buenos Aires el próximo 16 de marzo a las 20:30 hrs. Cabe destacar que las canciones del musical serán presentadas enteramente en idioma español.

VIDEO ENTREVISTA DE 26 NOTICIAS EN 2 PARTES:

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